lunes, 7 de marzo de 2011

RUMASA, EL IMPERIO FICTICIO

No me parece mejor manera para inaugurar este blog que publicar un artículo sobre Rumasa-Nueva Rumasa. He recopilado mucha información pero intentaré sintetizar con lo más importante.

José María Ruiz Mateos y Jiménez de Tejada es el Marqués de Olivara y actualmente tiene trece hijos y ochenta años. En 1961 creó un grupo de 700 empresas llamado Rumasa, con 60.000 trabajadores y una abeja como logotipo. Era el grupo empresarial más grande de España y, entre muchas otras marcas, poseía Hoteles Hotasa, Garvey, Banco Atlántico, Galerías Preciados o Loewe.

El 23 de febrero de 1983 el gobierno central, presidido por Felipe González, decidió expropiar todas sus empresas. El motivo principal era que el imperio de Ruiz Mateos era demasiado grande y estaba corriendo muchos riesgos que podían hacer quebrar el grupo empresarial. También se descubrió lo que se llama una enorme caja B (la gente de a pie lo conoce como dinero negro). Además, Rumasa debía muchos millones a la Seguridad Social y Hacienda, en gran parte porque el IRPF que retenía de los trabajadores no lo entregaba a Hacienda. Además, los propios bancos de Rumasa concedían créditos muy arriesgados a otras empresas del grupo y encima estos bancos actuaban al margen del Banco de España y, por tanto, no estaba tan controlada su actividad.


Hay muchos que aún piensan que Miguel Boyer, entonces ministro de Economía, Hacienda y Comercio, tendría que haber llevado por la vía judicial el caso Rumasa. El PSOE tenía miedo de que el principal grupo empresarial del país se fuera a pique y dejara a tanta gente sin trabajo y un montón de deudas por el camino. En definitiva, no quería que todo el país pagara los platos rotos de un empresario que le gustaba tanto el riesgo y jugar con la ley. Ruiz Mateos, perteneciente al Opus Dei, era una “mosca cojonera” para el gobierno porque estaba radicalmente en contra de él. Indudablemente, para el PSOE fue un alivio aniquilar Rumasa. Pero no seré yo quien critique esta acción de Felipe González, porque en un momento tan delicado para la economía española no se podía permitir que creciera tanto un imperio a base de estafar al Estado (que somos todos) e hipotecar la viabilidad de unos bancos que funcionaban al margen del Banco de España. Bajo mi punto de vista, el desvío de Rumasa respecto la legalidad era tan grande que se estaba convirtiendo en un gigante a base de estafas, dinero en negro y prácticas ilegales de todo tipo. Competencia desleal, vamos.

Y ahora Nueva Rumasa
Hay quien sostiene que los hechos históricos se repiten cíclica
mente, pero en este caso el ciclo ha sido corto, porque Ruiz Mateos, después de pasar varias veces por la cárcel por delitos diferentes (todos relacionados con negocios empresariales poco legales), montó en 1996 el grupo Nueva Rumasa, con la intención de resurgir de sus cenizas y volver a su poder anterior. Como él ya no podía ser titular de nada, colocó a sus trece hijos como propietarios de las diferentes empresas que fue creando. A su mujer, Teresa Rivero, la puso al frente del Rayo Vallecano, club de fútbol que también posee la familia. Además, Ruiz Mateos tomó precauciones.

Nueva Rumasa ya no se considera un holding porque la sede de la mayoría de las empresas está en paraísos fiscales. De esta forma, no se considera como grupo empresarial que dependa de la misma filial y no se podría repetir la expropiación de 1983. Pero hay cosas que no cambian; desde 1996 Nueva Rumasa decidió de nuevo realizar inversiones muy arriesgadas para crecer cuanto más rápido mejor, pero por el camino empezó a acumular muchas pérdidas y deudas insalvables (es lo que los economistas llamamos crecimiento insostenido). Como la sede de las empresas se encuentra en paraísos fiscales, no se sabía de estas pérdidas. Para taparlas Nueva Rumasa lanzó en 2009 anuncios en televisión y otros medios, en los que se pedía a los ciudadanos préstamos de 50.000 euros a cambio de devolver lo prestado más un 8-10% de interés, muy alto comparado con lo que ofrecen los bancos actualmente. La CNMV, que sería como la policía que se encarga de este tipo de operaciones, aconsejó en varias ocasiones que nadie invirtiera en Nueva Rumasa. Para que esta policía intervenga, hay que cumplir unos requisitos, como por ejemplo que esta operación se tramite a través de bancos o cajas de ahorro. Pero Ruiz Mateos, que para saltarse las leyes es un hacha, daba su número de teléfono en el anuncio y era él quien trataba directamente con los inversores, nada de intermediarios.

El caso es que este dinero que pidió a la gente no era para invertir en crecimiento, sino para tapar temporalmente los agujeros tan grandes que tenía de deudas (nuevamente, entre muchos otros, con la Seguridad Social). Ahora se ha ido destapando poco a poco que Nueva Rumasa tiene muchas pérdidas y debe mucho dinero. Hay un truco legal (y que ha utilizado recientemente Ruiz Mateos) para que no demanden temporalmente a las empresas de Ruiz Mateos, que es solicitar un preconcurso de acreedores, que da tres meses de margen al empresario para reconducir su situación de deudas. Con esta noticia se han encendido todas las alarmas de aquellos que invirtieron en su día 50.000 euros o más en Nueva Rumasa. Ahora temen que no recuperen su inversión. En la web oficial http://www.nuevarumasa.com/ se habla de más de 5.000 inversores (por tanto, más de 250 millones de euros prestados). Los datos de morosidad de las empresas no se actualizan con rapidez, y es por eso que cada día aparecen nuevas noticias sobre las deudas impagadas que acumulan. Hasta hace unos días, Nueva Rumasa acumulaba 161 millones de euros de morosidad (deudas que han vencido y no ha devuelto).

¿Qué pasará ahora con Nueva Rumasa? No se sabe. Algunos trabajadores lo apoyan: http://blog.ruiz-mateos.com/ Otros trabajadores se manifiestan en contra. La prensa lo critica duramente. Los inversores lo maldicen. Los columnistas lo apalean. Los socialistas lo maldicen. Los del Opus Dei lo defienden. Los jugadores del Rayo están intranquilos. En poco tiempo veremos el final de la historia… (o no).

Para elaborar este artículo se han consultado las siguientes fuentes: varias ediciones de los periódicos El País, La Vanguardia, El Mundo, ABC, Diario de Jerez, Diario de Sevilla, Público, de las emisoras de radio Cadena Ser, Cadena Cope, el BOE y las páginas web www.eleconomista.es, www.nuevarumasa.com, www.opuslibros.org, www.intereconomia.com y www.rtve.es.